LECTURA DEL PRIMER CAPÍTULO DE MI NOVELA "EL AZUL DE TU CIELO"

 

¡Buenas tardes! Hoy me paso para compartir con vosotros el primer capítulo de mi última novela El azul de tu cielo que como todos sabéis podéis conseguir en Amazon en eBook, libro de tapa blanda y libro de tapa dura. He creado un vídeo en forma de "audiolibro" con imágenes que espero que os guste. De todas formas, os dejo aquí el capítulo en texto también. Así mismo quiero recordaros que para cualquier duda sobre cómo adquirir cualquiera de mis novelas, para solicitar un autógrafo o para hacerme llegar alguna pregunta o duda sobre mis novelas o darme vuestra opinión sobre ellas podéis escribirme al correo de contacto que está puesto aquí y en mi página web: contactonuriaelisabeth@gmail.com 

Para los que aún no sepáis de qué libro se trata o cuál es su argumento, os diré lo siguiente: 

¿Crees en las segundas oportunidades? La protagonista de esta novela la tuvo. Después de una relación tóxica de maltrato psicológico y, finalmente, físico logró vencer el miedo y consiguió vivir una historia de amor única y verdadera. Súmate a la esperanza. Lee el El azul de tu cielo.

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LAURA

24 de junio de 2019

Me siento volátil y etérea; liberada de todas mis ataduras mundanas, del dolor físico. Es desde esta ingravidez que comienzo a ver con claridad. A veces, el ser humano se obstina en producirse una ceguera continua mucho más dañina que la física. Nos empeñamos en construir cuentos que no podrían contener magia ni aunque la mismísima Campanilla agitase sus alas. Nos sentimos como un rompecabezas a la deriva que intenta encontrar las piezas que le faltan y, a veces, queremos encajarlas con otras que no corresponden al mismo puzle y es entonces cuando caemos en la trampa; en mi caso, mortal. Durante mucho tiempo, he sido dueña de mi propia cárcel. Y digo dueña, porque fui testigo de cómo la construían para mí día a día, a cada segundo que transcurría había un ladrillo más, y no hice nada. 

Ahora que me rodea el silencio y la paz me abraza, soy consciente de todo lo que hice mal y no puedo evitar recordar estos últimos años como una película. Avanzo y retrocedo por ella y me detengo en aquellos detalles que consideré inofensivos, pero que, en realidad, estaban cavando mi tumba. Miro a mi marido y la indiferencia es tan grande que tengo que hacer un esfuerzo para reconocerlo. 

Es increíble lo que puede llegar a desdibujarse alguien tras decepcionarte profundamente. Cuando la verdad se impone con fuerza, quien creías hecho a medida para ti, se convierte en un desconocido y, al mirarlo, un vacío inmenso se apodera de tu pecho y no puedes evitar que te inunde la pena porque no sientes nada. NADA. Y la parte de tu vida que ha ocupado, desaparece como si una laguna inmensa hubiera arrasado con media vida tuya, llenándola de frío y, con ello, convirtiendo el agua en hielo. Una época helada en tu corta existencia. Pero no todo es oscuridad en la vida. Siempre hay alguien que te extiende la mano, que abre una ventana, que te irradia con su luz. Seres maravillosos que pueden dar un vuelco a tu truncada vida. Yo lo comprendí cuando apareció él y su mirada me irradió. Su bonhomía me salvó y es quien me mantiene viva, quien dibujó una salida y trazó un plan de escape sin ni siquiera saberlo. Él me devolvió la fe y desde que lo conocí, no pude evitar perderme en el azul de su cielo.