Hoy voy a hablaros de La maldición del brujo-leopardo de Heinz Delam. Es un libro que me marcó cuando lo leí por primera vez en la adolescencia. Recuerdo que fue una tarea de Lengua y Literatura. Yo tendría unos once o doce años, no lo recuerdo exactamente. El caso es que en aquel entonces yo no tenía la capacidad de comprender el difícil entramado que se escondía bajo el argumento. Es un libro que con el paso de los años he vuelto a releer unas tres veces más; la última no hace mucho. Siempre me fascinó el misterio que envuelve a la historia, la intriga y suspense que crean las aventuras que el protagonista vive en busca de la verdad y, por supuesto, las descripciones de los sentimientos y sensaciones que describe.
La novela trata sobre un joven belga, Paul Verheyen, que vive con sus padres en una ciudad del Zaire. Todo empieza a desencadenarse cuando Paul visita un antiguo cementerio. La aparición del espíritu de una niña lo deja fascinado y comienzan a desatarse una serie de sentimientos extraños hacia ella que lo llevan a investigar la causa de su muerte. Las sucesivas apariciones de la difunta niña activan algo en él que lo hace soñar y recordar otra realidad en la que la niña, Anne Marie, existe y es su esposa. Paul, preocupado, termina adentrándose en los misterios de la magia africana y descubriendo que Anne Marie había muerto por un cambio de realidad a manos del temido brujo-leopardo. ¿Lo que Paul siente por Anne Marie será lo suficientemente grande como para cambiar la realidad? (Esto último no os lo revelo).
Esta novela, a mi parecer, bajo la mano de la magia africana, está abriendo la mente hacia un universo de vidas paralelas (realidades distintas con caminos diferentes donde cada persona juega roles distintos a la vida física actual y consciente, y que se desarrollan en un campo cuántico diferente). Algo así como ocurre en la película Todo a la vez en todas partes, con la salvedad de que en esta novela, gracias a la magia es posible mudarse a una de esas realidades de manera definitiva.
Como podéis apreciar, es un tema controvertido y difícil de entender. A mí me llevó un tiempo comprenderlo. Hace falta ser curioso y abierto de mente para plantearse las diferentes versiones que existen sobre la existencia humana. A todos aquellos que os sintáis así, os animo a leer esta novela y saquéis vuestras propias conclusiones o simplemente disfrutéis de la historia.
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