sábado, 31 de diciembre de 2016

Felices Fiestas (Cuento de Chejov)

Con motivo de la Navidad y del comienzo del Nuevo Año 2017, actualizo para desearos unas felices fiestas. Para ello, se me ha ocurrido compartir con vosotros un bonito cuento de Chejov llamado: La tristeza.



La tristeza
Anton Chejov
La capital está envuelta en las penumbras vespertinas. La nieve cae lentamente en gruesos copos, gira alrededor de los faroles encendidos, extiende su capa fina y blanda sobre los tejados, sobre los lomos de los caballos, sobre los hombros humanos, sobre los sombreros.

El cochero Yona está todo blanco, como un aparecido. Sentado en el pescante de su trineo, encorvado el cuerpo cuanto puede estarlo un cuerpo humano, permanece inmóvil. Diríase que ni un alud de nieve que le cayese encima lo sacaría de su quietud.

Su caballo está también blanco e inmóvil. Por su inmovilidad, por las líneas rígidas de su cuerpo, por la tiesura de palo de sus patas, aun mirado de cerca parece un caballo de dulce de los que se les compran a los chiquillos por un copec. Hállase sumido en sus reflexiones: un hombre o un caballo, arrancados del trabajo campestre y lanzados al infierno de una gran ciudad, como Yona y su caballo, están siempre entregados a tristes pensamientos. Es demasiado grande la diferencia entre la apacible vida rústica y la vida agitada, toda ruido y angustia, de las ciudades relumbrantes de luces.

Hace mucho tiempo que Yona y su caballo permanecen inmóviles. Han salido a la calle antes de almorzar; pero Yona no ha ganado nada.

Las sombras se van adensando. La luz de los faroles se va haciendo más intensa, más brillante. El ruido aumenta.

-¡Cochero! -oye de pronto Yona-. ¡Llévame a Viborgskaya!

Yona se estremece. A través de las pestañas cubiertas de nieve ve a un militar con impermeable.

-¿Oyes? ¡A Viborgskaya! ¿Estás dormido?

Yona le da un latigazo al caballo, que se sacude la nieve del lomo. El militar toma asiento en el trineo. El cochero arrea al caballo, estira el cuello como un cisne y agita el látigo. El caballo también estira el cuello, levanta las patas, y, sin apresurarse, se pone en marcha.

-¡Ten cuidado! -grita otro cochero invisible, con cólera-. ¡Nos vas a atropellar, imbécil! ¡A la derecha!

-¡Vaya un cochero! -dice el militar-. ¡A la derecha!

Siguen oyéndose los juramentos del cochero invisible. Un transeúnte que tropieza con el caballo de Yona gruñe amenazador. Yona, confuso, avergonzado, descarga algunos latigazos sobre el lomo del caballo. Parece aturdido, atontado, y mira alrededor como si acabara de despertar de un sueño profundo.

-¡Se diría que todo el mundo ha organizado una conspiración contra ti! -dice en tono irónico el militar-. Todos procuran fastidiarte, meterse entre las patas de tu caballo. ¡Una verdadera conspiración!

Yona vuelve la cabeza y abre la boca. Se ve que quiere decir algo; pero sus labios están como paralizados y no puede pronunciar una palabra.

El cliente advierte sus esfuerzos y pregunta:

-¿Qué hay?

Yona hace un nuevo esfuerzo y contesta con voz ahogada:

-Ya ve usted, señor... He perdido a mi hijo... Murió la semana pasada...

-¿De veras?... ¿Y de qué murió?

Yona, alentado por esta pregunta, se vuelve aún más hacia el cliente y dice:

-No lo sé... De una de tantas enfermedades... Ha estado tres meses en el hospital y a la postre... Dios que lo ha querido.

-¡A la derecha! -óyese de nuevo gritar furiosamente-. ¡Parece que estás ciego, imbécil!

-¡A ver! -dice el militar-. Ve un poco más aprisa. A este paso no llegaremos nunca. ¡Dale algún latigazo al caballo!

Yona estira de nuevo el cuello como un cisne, se levanta un poco, y de un modo torpe, pesado, agita el látigo.

Se vuelve repetidas veces hacia su cliente, deseoso de seguir la conversación; pero el otro ha cerrado los ojos y no parece dispuesto a escucharle.

Por fin, llegan a Viborgskaya. El cochero se detiene ante la casa indicada; el cliente se apea. Yona vuelve a quedarse solo con su caballo. Se estaciona ante una taberna y espera, sentado en el pescante, encorvado, inmóvil. De nuevo la nieve cubre su cuerpo y envuelve en un blanco cendal caballo y trineo.

Una hora, dos... ¡Nadie! ¡Ni un cliente!

Mas he aquí que Yona torna a estremecerse: ve detenerse ante él a tres jóvenes. Dos son altos, delgados; el tercero, bajo y jorobado.

-¡Cochero, llévanos al puesto de policía! ¡Veinte copecs por los tres!

Yona coge las riendas, se endereza. Veinte copecs es demasiado poco; pero, no obstante, acepta; lo que a él le importa es tener clientes.

Los tres jóvenes, tropezando y jurando, se acercan al trineo. Como solo hay dos asientos, discuten largamente cuál de los tres ha de ir de pie. Por fin se decide que vaya de pie el jorobado.

-¡Bueno; en marcha! -le grita el jorobado a Yona, colocándose a su espalda-. ¡Qué gorro llevas, muchacho! Me apuesto cualquier cosa a que en toda la capital no se puede encontrar un gorro más feo...

-¡El señor está de buen humor! -dice Yona con risa forzada-. Mi gorro...

-¡Bueno, bueno! Arrea un poco a tu caballo. A este paso no llegaremos nunca. Si no andas más aprisa te administraré unos cuantos sopapos.

-Me duele la cabeza -dice uno de los jóvenes-. Ayer, yo y Vaska nos bebimos en casa de Dukmasov cuatro botellas de caña.

-¡Eso no es verdad! -responde el otro-. Eres un embustero, amigo, y sabes que nadie te cree.

-¡Palabra de honor!

-¡Oh, tu honor! No daría yo por él ni un céntimo.

Yona, deseoso de entablar conversación, vuelve la cabeza, y, enseñando los dientes, ríe atipladamente.

-¡Ji, ji, ji!... ¡Qué buen humor!

-¡Vamos, vejestorio! -grita enojado el chepudo-. ¿Quieres ir más aprisa o no? Dale de firme a tu caballo perezoso. ¡Qué diablo!

Yona agita su látigo, agita las manos, agita todo el cuerpo. A pesar de todo, está contento; no está solo. Le riñen, lo insultan; pero, al menos, oye voces humanas. Los jóvenes gritan, juran, hablan de mujeres. En un momento que se le antoja oportuno, Yona se vuelve de nuevo hacia los clientes y dice:

-Y yo, señores, acabo de perder a mi hijo. Murió la semana pasada...

-¡Todos nos hemos de morir! -contesta el chepudo-. ¿Pero quieres ir más aprisa? ¡Esto es insoportable! Prefiero ir a pie.

-Si quieres que vaya más aprisa dale un sopapo -le aconseja uno de sus camaradas.

-¿Oye, viejo, estás enfermo? -grita el chepudo-. Te la vas a ganar si esto continúa.

Y, hablando así, le da un puñetazo en la espalda.

-¡Ji, ji, ji! -ríe, sin ganas, Yona-. ¡Dios les conserve el buen humor, señores!

-Cochero, ¿eres casado? -pregunta uno de los clientes.

-¿Yo? !Ji, ji, ji! ¡Qué señores más alegres! No, no tengo a nadie... Solo me espera la sepultura... Mi hijo ha muerto; pero a mí la muerte no me quiere. Se ha equivocado, y en lugar de cargar conmigo ha cargado con mi hijo.

Y vuelve de nuevo la cabeza para contar cómo ha muerto su hijo; pero en este momento el jorobado, lanzando un suspiro de satisfacción, exclama:

-¡Por fin, hemos llegado!

Yona recibe los veinte copecs convenidos y los clientes se apean. Los sigue con los ojos hasta que desaparecen en un portal.

Torna a quedarse solo con su caballo. La tristeza invade de nuevo, más dura, más cruel, su fatigado corazón. Observa a la multitud que pasa por la calle, como buscando entre los miles de transeúntes alguien que quiera escucharle. Pero la gente parece tener prisa y pasa sin fijarse en él.

Su tristeza a cada momento es más intensa. Enorme, infinita, si pudiera salir de su pecho inundaría al mundo entero.

Yona ve a un portero que se asoma a la puerta con un paquete y trata de entablar con él conversación.

-¿Qué hora es? -le pregunta, melifluo.

-Van a dar las diez -contesta el otro-. Aléjese un poco: no debe usted permanecer delante de la puerta.

Yona avanza un poco, se encorva de nuevo y se sume en sus tristes pensamientos. Se ha convencido de que es inútil dirigirse a la gente.

Pasa otra hora. Se siente muy mal y decide retirarse. Se yergue, agita el látigo.

-No puedo más -murmura-. Hay que irse a acostar.

El caballo, como si hubiera entendido las palabras de su viejo amo, emprende un presuroso trote.

Una hora después Yona está en su casa, es decir, en una vasta y sucia habitación, donde, acostados en el suelo o en bancos, duermen docenas de cocheros. La atmósfera es pesada, irrespirable. Suenan ronquidos.

Yona se arrepiente de haber vuelto tan pronto. Además, no ha ganado casi nada. Quizá por eso -piensa- se siente tan desgraciado.

En un rincón, un joven cochero se incorpora. Se rasca el seno y la cabeza y busca algo con la mirada.

-¿Quieres beber? -le pregunta Yona.

-Sí.

-Aquí tienes agua... He perdido a mi hijo... ¿Lo sabías?... La semana pasada, en el hospital... ¡Qué desgracia!

Pero sus palabras no han producido efecto alguno. El cochero no le ha hecho caso, se ha vuelto a acostar, se ha tapado la cabeza con la colcha y momentos después se le oye roncar.

Yona exhala un suspiro. Experimenta una necesidad imperiosa, irresistible, de hablar de su desgracia. Casi ha transcurrido una semana desde la muerte de su hijo; pero no ha tenido aún ocasión de hablar de ella con una persona de corazón. Quisiera hablar de ella largamente, contarla con todos sus detalles. Necesita referir cómo enfermó su hijo, lo que ha sufrido, las palabras que ha pronunciado al morir. Quisiera también referir cómo ha sido el entierro... Su difunto hijo ha dejado en la aldea una niña de la que también quisiera hablar. ¡Tiene tantas cosas que contar! ¡Qué no daría él por encontrar alguien que se prestase a escucharlo, sacudiendo compasivamente la cabeza, suspirando, compadeciéndolo! Lo mejor sería contárselo todo a cualquier mujer de su aldea; a las mujeres, aunque sean tontas, les gusta eso, y basta decirles dos palabras para que viertan torrentes de lágrimas.

Yona decide ir a ver a su caballo.

Se viste y sale a la cuadra.

El caballo, inmóvil, come heno.

-¿Comes? -le dice Yona, dándole palmaditas en el lomo-. ¿Qué se le va a hacer, muchacho? Como no hemos ganado para comprar avena hay que contentarse con heno... Soy ya demasiado viejo para ganar mucho... A decir verdad, yo no debía ya trabajar; mi hijo me hubiera reemplazado. Era un verdadero, un soberbio cochero; conocía su oficio como pocos. Desgraciadamente, ha muerto...

Tras una corta pausa, Yona continúa:

-Sí, amigo... ha muerto... ¿Comprendes? Es como si tú tuvieras un hijo y se muriera... Naturalmente, sufrirías, ¿verdad?...

El caballo sigue comiendo heno, escucha a su viejo amo y exhala un aliento húmedo y cálido.

Yona, escuchado al cabo por un ser viviente, desahoga su corazón contándoselo todo.


FIN






¡FELIZ   2 0 1 7!
Si tienes un sueño sin cumplir,
tendrás una meta por alcanzar.
La felicidad es la mezcla de
sueños y realidades.
¡Que el año nuevo multiplique
tu capacidad para soñar!


sábado, 3 de diciembre de 2016

Tributo a Brendan Fraser

Hoy estreno la sección de Cine con mi actor americano favorito: Brendan Fraser, con motivo de su cumpleaños. El 3 de diciembre de 1968 nació una estrella, que hasta el día de hoy, ha tenido una gran trayectoria profesional. Si bien es cierto que en España se le ha perdido la pista hace unos años, he de decir que ha seguido trabajando en películas y serie de televisión como: las series The Affair, Texas Rising y su última película The Field, un thriller indio. El actor Brendan Fraser comenzó a abrirse camino en el cine en 1991. Una de sus características más sobresalientes es su virtud para encajar en cualquier papel que se proponga. Estamos ante un actor polifacético que siempre logra convencer al público. Aunque ha sido más comúnmente conocido por sus dotes cómicas, tal como ha demostrado en: El hombre de California (1992), George de la jungla (1997), Al diablo con el diablo (2000), En pata de guerra (2010), Buscando a Eva (1999) entre otras; también ha destacado en papeles dramáticos como podemos ver en School Ties (1992), Con honores (1994), Dioses y monstruos (1998), El americano impasible (2002), Crash (2004), The Air I breath (Cuatro vidas) (2007), Medidas extraordinarias (2010), Breakout (2013), entre otras.
 Por supuesto, cabe destacar su faceta de aventurero, que lo llevó a lo más alto con la trilogía de La momia (1999), (2001) y (2008). Su personaje Rick O’Connell siempre será un mito y quedará en nuestros corazones. Así mismo, también ha protagonizado películas de ciencia ficción y fantasía que han embaucado a la gran pantalla, tales como: Viaje al centro de la tierra (2008) y Corazón de tinta (2009).
A parte de su faceta de actor, también podemos ver a Fraser como doblador de películas en: Sinbad: Beyond the Veil of Mists (2000), Escape from planet earth (Operación escape) (2013) y The nut job (Locos por las nueces) (2014). Una curiosidad es que dobló a Taz en Looney Tunes: Back in action (2003) donde actuaba con papel protagonista.
Sin duda alguna debemos destacar su faceta de productor y productor ejecutivo en películas como: The last time (La última oportunidad) (2006), Viaje al centro de la tierra (2008), En pata de guerra (Furry vengeance) (2010), Stand Off (Atraco en Belfast) (2012) y Breakout (2013).

Dicho esto, a mi juicio, Brendan Fraser es un actor versátil y espero verlo en otros muchos papeles.
Abajo os adjunto la fructífera filmografía que no os podéis perder.

Y para terminar, desear un Feliz Cumpleaños a Brendan Fraser. Te deseo todo lo mejor del mundo y muchos éxitos, que podamos seguir viéndote en la gran pantalla. Nunca borres tu sonrisa.


A continuación os dejo también un video que he creado yo misma con algunas de sus mejores películas en sus diferentes facetas. Me hubiera gustado ponerlas todas, pero eran demasiadas, así que hice una selección. Espero que os guste.
 https://www.youtube.com/watch?v=QB3zsyjCPA8

Aquí os dejo la filmografía: 

Año     Título

1991    Dogfight
1992    El hombre de California
1992    School Ties
1993    Twenty Bucks
1993    Younger and Younger
1993    Son In Law
1994    With Honors (Con honores)
1994    Airheads (Cabezas huecas)
1994    In the Army Now
1994    The Scout (El cazatalentos)
1995    The Passion of Darkly Noon
1995    Now and Then
1996    Brain Candy
1996    Con cariño desde el cielo
1996    Glory Daze
1996    The Twilight of the Golds
1997    George de la jungla
1997    Still Breathing
1998    Gods and Monsters (Dioses y monstruos)
1999    Blast from the Past (Buscando a Eva)
1999    La momia
1999    Dudley Do-Right
2000    Al diablo con el diablo
2000    Sinbad: Beyond the Veil of Mists (Voz)
2001    Monkeybone
2001    El regreso de la momia
2002    The Quiet American (El americano impasible)
2003    Dickie Roberts: Former Child Star
2003    Looney Tunes: Back in Action
2004    Crash
2006    Journey to the End of the Night
2006    The Last Time (La última oportunidad)
2007    The Air I Breathe (Cuatro vidas)
2008    Viaje al centro de la Tierra
2008    La momia: la tumba del emperador Dragón
2009    Corazón de tinta
2009    G.I. Joe: The Rise of Cobra
2010    Extraordinary Measures 
2010    Furry Vengeance (En pata de guerra)
2012    Stand Off  (Atraco en Belfast)
2013    Escape from Planet Earth (Voz)
2013    A Case of You
2013    HairBrained (Ni un pelo de listo)
2013    Pawn Shop Chronicles
2013    Breakout 
2013    Gimme Shelter
2014    The Nut Job (Voz)
2016    The Field

Presentación del espacio Cine



Este espacio va a estar dedicado al Cine que  no es más que una plasmación de la literatura llevada a la gran pantalla. Es por tanto un arte que complementa a la literatura. Me encanta porque la relación entre ambos es muy estrecha. En este espacio hablaré sobre películas en cartelera, actores y actrices importantes, directores de cine, películas que llevan libros de actualidad a la pantalla, etc.  

lunes, 17 de octubre de 2016

Homage and interview Mike Wells

I inaugurate this section with a tribute to American best-selling author, Mike Wells, who has given me the honor of answering a few questions that I share with you with the intention that you may know him better and encourage you also know his works.

Mike Wells is an American bestselling author of over 20 "unputdownable" thriller and suspense novels, including Lust, Money & Murder and Passion, Power & Sin. He is also known for his young adult books, such as The Mysterious Disappearance of Kurt Kramer, The Wrong Side of the Tracks, and Wild Child, which are used by English teachers in high schools and colleges worldwide. Formerly a screenwriter, Wells has a fast-paced, cinematic writing style. His work is often compared to that of the late Sidney Sheldon, with strong and inspiring female heroes, tightly-written scenes, engaging action/dialogue, and numerous plot twists. He currently lives in Europe and has taught in the Creative Writing program at the University of Oxford. 


Here the interview with Mike Wells:

—When did you start to write and why?

— Although I didn't actually start writing any full-length stories until I was a teenager, I was inspired to write as early as age nine or ten. I distinctly remember being absorbed in the Hardy Boys series books and feeling inspired to create a whole world like that, filled with interesting people and situations, a world that seems as real as the world in these books seemed to me. It's a heady thing, being able to do that, if you can pull it off. For most people, it's a learning curve and takes a lot of work.


—What advice would you give to people who want to pursue writing?

— I would advise those who want to write fiction seriously, i.e., for money, to do two things. First, take the time to learn the rules of "good" fiction writing--the craft part--and then learn to break those rules if you see fit. Read books on the craft of writing, how to write effective dialogue, how to plot well-rounded stories, the rules of the genres you want to write in (the reader expectations) and so on. This is important to get you going, and also to give you confidence, to make you feel like you know what you're doing. Then, after you've written some stories and you start to feel even more confidence, have the courage to start breaking the rules that don't feel right to you. This is the process of developing your own unique voice and style. Ultimately, fiction is art, and there are no rules. If you want to be successful, you need to develop a writing style and perhaps even a genre or sub-genre that is just as unique as you are. The second thing I would advise novice writers to do is get your work out there to test it against real readers, to see if it engages them, as soon as possible. Soliciting the opinions of professionals, I think, is largely a waste of time--we will just tell you to write the way we do, and you don't want that. Again, you want to develop your own style. At the end of the day, all that matters are readers. The sure-fire way to find out if you're writing is "good" is to start sending it out to literary agents or publishers, or posting it online and seeing if people are engaged by it. What I recommend is posting only the beginning of your story and ending it at a place where there is a cliffhanger, and then see if people ask for the rest of it. If they don't ask you for more, then you need to find out why. Where exactly are readers stopping? They may not even be getting past the first paragraph. Are the characters doing/saying unbelievable things? Are they giving speeches to each other instead of having short, back-and-forth exchanges that mimic real life? Are there too many grammatical errors and typos? Are you introducing too many characters too fast? Are you starting the story too early, before the plot gets interesting? Are you bombarding the reader too much unnecessary backstory information? There are lots of reasons that your writing may not be engaging readers, and that's the case, you need to find out exactly why and correct it. This is an iterative process and make take you quite a few cycles. At times you may realize that you have to dump a particular story and start over again from scratch, that the entire thing just does not work for some reason. But this is the process of learning to be a good writer. So, that's my advice. Learn the rules and then learn to break them, and then get your work out there and fine-tune it until readers are engaged from the first sentence all the way to the last page, until they reach the words THE END.

You can buy his books at: https://www.amazon.com/Mike-Wells/e/B004MCEC1U and other platforms that you can find in his blog.

If you want to know more about Mike Wells, I advise you to enter in his Blog:



Homenaje y entrevista a Mike Wells

Inauguro este apartado con un homenaje al autor americano de best seller, Mike Wells, quien me ha concedido el honor de contestarme unas preguntas que comparto con vosotros con la intención de que le conozcáis mejor y ello os anime a conocer también sus obras.

Mike Wells ha escrito alrededor de más de 20 thriller y novelas de suspense incluyendo: Lust, Money & Murder y Passion, Power & Sin. Es también conocido por sus libros para jóvenes adultos tales como: The Mysterious Disappearance of Kurt Kramer, The Wrong Side of the Tracks, and Wild Child, que han sido usados por profesores ingleses en las escuelas secundarias y universidades por todo el mundo. Wells tiene un estilo de escritura cinematográfica de ritmo rápido. Su trabajo es a menudo comparado con el Sidney Sheldon, con fuertes e inspiradoras heroínas femeninas, escenas bien escritas llenas de acción y tensión, y numerosos giros de la trama. Actualmente vive en Europa y ha dado clases en el programa de Escritura Creativa en la Universidad de Oxford.

Aquí os dejo la entrevista con Mike Wells:

—¿Cuándo empezaste a escribir y por qué?

A pesar de que, en realidad, no empecé a escribir historias largas hasta que yo fui un adolescente, me inspiré para escribir ya a los nueve o diez años. Recuerdo claramente ser absorbido por los libros de la serie Hardy Boys y sintiéndome inspirado para crear un mundo así, lleno de gente y situaciones interesantes, un mundo tan real como el mundo que en estos libros me parecía a mí. Es algo embriagador, ser capaz de hacer eso, si puedes llevarlo a cabo. Para la mayoría de la gente, es una curva de aprendizaje y lleva mucho trabajo.

—¿Qué consejo le darías a las personas que quieren dedicarse a escribir?

Yo aconsejaría a los que quieren escribir ficción en serio, es decir, para ganar dinero, hacer dos cosas. En primer lugar, emplear tiempo para aprender las reglas de la "buena"  escritura de ficción - la parte del oficio- y luego aprender a romper esas reglas si lo considera oportuno. Leer libros sobre el oficio de escribir, cómo escribir un diálogo eficaz, cómo trazar historias bien redondeadas, las reglas de los géneros que desea escribir (las expectativas del lector) y así sucesivamente. Esto es importante para avanzar, y también para ganar confianza, para que sientas que sabes lo que estás haciendo. Entonces, después de haber escrito algunas historias, empiezas a sentir más confianza y a tener el valor de empezar a romper las reglas que no consideras adecuadas para ti. Este es el proceso para desarrollar tu propia voz y estilo único. En última instancia, la ficción es un arte, y no hay reglas. Si usted quiere tener éxito, es necesario desarrollar un estilo de escritura y tal vez incluso un género o subgénero que sea tan único como es usted. La segunda cosa que aconsejaría a escritores noveles hacer, es conseguir sacar tu trabajo, tan pronto como sea posible, para probarlo frente a los lectores reales para ver si se involucran. Solicitar las opiniones de los profesionales, creo, es en gran medida una pérdida de tiempo – nosotros nos limitaremos a decirte la forma en que escribimos, y tú no quieres eso. Una vez más, quieres desarrollar tu propio estilo. Al final, todo lo que importa son los lectores. La forma más segura de saber si lo que se está escribiendo es "bueno" es empezar a enviarlo a los agentes literarios o editores, o publicarla en línea y ver si la gente está comprometida con ella. Lo que recomiendo es publicar sólo el comienzo de tu historia y que termine en un lugar donde haya una situación tensa, y luego ver si la gente se pregunta por el resto de la misma. Si ellos no le piden más, entonces usted necesita averiguar por qué. ¿Dónde exactamente se están parando los lectores? Puede incluso que no hayan pasado del primer párrafo. ¿Están haciendo / diciendo los personajes cosas no creíbles? ¿Están dando discursos el uno al otro en lugar de tener intercambios de diálogo fluido que imitan la vida real? ¿Hay demasiados errores gramaticales y errores ortográficos? ¿Estás introduciendo demasiados caracteres demasiado rápido? ¿Estás comenzando la historia demasiado pronto, antes de que la trama se ponga interesante? ¿Estás bombardeando al lector con demasiada información innecesaria? Hay un montón de razones por las que tu escritura puede no estar involucrando a los lectores, y si ese es el caso, es necesario averiguar exactamente por qué y corregirlo. Este es un proceso iterativo y lleva bastante tiempo. En ocasiones, puede darse cuenta de que usted tiene que volcar una historia particular y empezar de nuevo desde cero, que la historia simplemente no funciona por alguna razón. Pero este es el proceso de aprender a ser un buen escritor. Por lo tanto, ese es mi consejo. Aprender las reglas y luego aprender a romperlas, y luego mostrar su trabajo y ponerlo a punto hasta que se involucra a los lectores desde la primera frase hasta el final de la última página, hasta que alcanzan las palabras THE END.

Podéis comprar sus libros en: https://www.amazon.com/Mike-Wells/e/B004MCEC1U y en otras plataformas que podréis encontrar en su Blog.

Si queréis saber más sobre Mike Wells, os aconsejo que entréis en su Blog:



domingo, 16 de octubre de 2016

Introducción a la literatura

Voy a dedicar este apartado a promocionar la literatura. Será un espacio para la lectura y los escritores. Para comentar, sobre todo, el mundo de la narrativa, ya que el teatro tiene un apartado independiente por su cualidad de ser a la vez texto escrito y espectáculo.  Actualizaré para recordar grandes obras y autores, al mismo tiempo que para ayudar a aquellos que comienzan su andadura en este mundo literario. Hablaremos tanto de obras españolas como internacionales e incluso puede que contemos con entrevistas a autores. 

lunes, 25 de julio de 2016

Los hilos de Vulcano

Inauguro el apartado de Teatro con el 62 Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida del que os iré informando y comentando. Comenzaré por la obra que acaba de estar en escena del 20 al 24 de Julio: Los hilos de Vulcano de la dramaturga Marta Torres. Con el siguiente elenco:
Toom-Pak
 Diosa Fortuna: Carmen París
Diosa Venus: Mélani Olivares
Dios Vulcano: Fele Martínez
Aspasia: Verónica Forqué
Dios Sol: Tomás Pozzi
Dios Marte: Javier Mora
 Daos: Santi Marín
                                   Ket ket: Nur al Levi 
                                   Acróbata: Alex Arce

La obra es una adaptación contemporánea de la obra clásica La Odisea de Homero, concretamente el Canto VIII. En este canto Alcinoo ordena una fiesta y la celebración de juegos en honor a su huésped. En el banquete el Aedo Demódoco (Diosa Fortuna) canta una historia cómica sobre los amoríos ilícitos de Ares (Dios Marte) y Afrodita (Diosa Venus), esposa de Hefesto (Vulcano). Helios (Dios Sol) que los había visto unirse en amor, alerta a Hefesto y éste al oír la noticia, dispone sobre la cama de los amantes unos hilos invisibles e irrompibles para inmovilizarlos. Hefesto convoca a los dioses para que sean testigos de la desvergüenza, aunque ellos se burlan de él en lugar de mostrarle su apoyo.

El tema de la obra es el de la infidelidad, el cual sigue candente en la actualidad. En esta adaptación se reivindica también los derechos de la mujer. Y como dice su dramaturga Marta Torres: «El matrimonio, sea de la índole que sea, legalizado o libre, sigue siendo base de nuestra organización social, y el pilar de la vida de la mayoría de nosotros. Es por ello que no deja de ser un tema prioritario a tratar, y necesario para el artista y el espectador».

La simbiosis formada por el empleo de la música a cargo de Toom-Pak, así como el lenguaje cómico empleado por los personajes hacen de esta adaptación una divertida comedia digna de ver, que provoca en múltiples ocasiones la risa del espectador, el cual se siente, a veces, identificado con el tema y las situaciones habituales que éste provoca.

Yo he asistido a esta obra personalmente y he de decir que el público tuvo una actitud muy favorable. El elenco de artistas me pareció muy ajustado al papel del personaje que interpretaban. Todos hicieron una interpretación magnífica a mi modo de ver, pero en especial me gustaría resaltar las muletillas y expresiones cómicas de los personajes principales: Dios Marte (Javier Mora), Dios Sol (Tomás Pozzi), Aspasia (Verónica Forqué), Diosa Venus (Mélani Olivares) y Dios Vulcano (Fele Martínez). Destacar también la interpretación vocal de la Diosa Fortuna (Carmen París).
Invito a quien haya visto la obra a que añada su opinión, y para aquellos que no la han visto os dejo un video publicado por la Tvextremeña.


Por último, si queréis saber más información sobre el Festival, os dejo la página oficial: 
http://www.festivaldemerida.es/


Introducción

Voy a dedicar este espacio a promocionar el teatro porque es un arte que me apasiona y quiero a través de este blog que llegue un poco de este arte a todos los que lo visiten. El teatro actualmente no está tan valorado como antiguamente y opino, como el resto de los entusiastas, que hay que revalorizarlo. Será un espacio donde comentaré obras teatrales y os animaré a que participéis, así como hablaré de directores teatrales, actores, etc. 

Presentación

Todo blog tiene un responsable detrás, y como es de ley saber quién anda metido entre tantas divagaciones, voy a presentarme. Mi nombre es Nuria Elisabeth, pero todo el mundo me conoce como Nuria. Soy graduada en Lengua y Literatura Españolas y recientemente he hecho cursos de Escritura Creativa en la Escuela de Escritores de Madrid. He de decir que tengo cuatro pasiones que abordan mi vida: la Literatura, Egipto, el Teatro y el Cine. Mi pasión por Egipto empezó siendo una niña. Con tan sólo nueve años sentí la llamada de los Faraones y desde entonces cada vez que iba a alguna librería o algún centro comercial donde vendieran libros, si encontraba por casualidad una enciclopedia de Egipto o algún libro relacionado, tenía automáticamente que comprármelo. Perdía horas mirando las fotografías de los templos, de los tesoros de las tumbas faraónicas y buscando secretos ocultos o leyendas misteriosas. En mi pasión por el Teatro, yo no sé si influirá o no el hecho de haber nacido en la ciudad de la cuna de la  dramaturgia, Mérida, como me dicen algunos de mis amigos, pero si bien es cierto que la sensación de plenitud que siento cuando asisto a una representación es inmensa. Disfruto de cada segundo. Y ya no solo asistiendo, si no también leyéndolo. Creo que el teatro tiene un matiz mágico y el hecho de que el público pueda conectar directamente con los actores hace de éste un espectáculo único. Mi pasión por el Cine empezó desde pequeña también. He visto infinidad de películas. Siempre me gusta echar un rato aunque sea los fines de semana para disfrutar de ello. Y sobre todo siempre he sentido cierta curiosidad y admiración por esa estrecha relación que une al cine con la literatura. De hecho en mi carrera no pude evitar estudiar una optativa relacionada con el tema. Aunque tengo que confesar que una de mis pasiones prevalece por encima de las otras: Literatura. Desde que tengo uso de razón me he pasado las horas imaginando, inventando, creando, escribiendo. Siempre que encontraba una libreta o un folio, lo primero que hacía era buscar un bolígrafo con el que escribir. Me daba igual que fuera una carta, una anécdota vivida o una historia inventada. Cualquier excusa era buena para ponerme a escribir. Pasé parte de mi adolescencia sumida entre folios en blanco que iba cubriendo con la tinta de mi bolígrafo. Esta afición tuve que postergarla para dedicarme enteramente a mis estudios. Pero con el tiempo me di cuenta de que se había convertido en algo más que una afición. Se había convertido en una razón de vivir. Historias y personajes que se forjan en mi cabeza y martillean mi subconsciente para que los arroje a la luz, para ser el puente entre ellos y el mundo real con el fin de que puedan contar sus verdades. Fue de esta manera que pasó a convertirse en una necesidad. Este año he tenido la inmensa suerte de poder publicar un relato breve para el XIII Libro de alumnos de la Escuela de Escritores de Madrid, titulado La mancha mínima. Os lo adjunto más abajo para quien quiera leerlo.


Sin aliento  
Nuria Elisabeth Sánchez Sánchez
Mérida, Badajoz, España 
                                      
Agradecimientos a Antonio, mi profesor, a mis compañeros y a todas las personas que habéis confiado en mí y me habéis acompañado en esta aventura de escribir y cumplir mi sueño. Como dicen en una de mis películas favoritas: «Delgada línea separa la coincidencia del destino».

Me acomodo en la silla ante la mesa y observo las pantallas sin prestar mucha atención. La noche va a ser larga. ¿Con quién me tocará compartirla? Me llama la atención un folleto que hay sobre la mesa, lo cojo y comienzo a leerlo. En ese mismo momento se abre la puerta y me sobresalto.
—Adivino que estás deseando ver la nueva exposición de momias —dice jovial mi compañero que entra y cierra la puerta.
—¡Tú siempre tan chistoso, Alex! —Sonrío—. Es lo que tiene trabajar en el Museo de Antigüedades Egipcias, ¿no? —Veo que arquea las cejas divertido—. No puedo negarte que me gusta todo esto.
Observo que posa la mano en la porra y la seriedad envuelve su semblante. Con la otra mano se afloja un poco la corbata y sus ojos azules me penetran.
—Yo tampoco puedo disimular cuando algo me gusta. —Me mira y trago saliva, y mi corazón se acelera al ver que camina hacia mí.
Alex agarra enérgico la silla como si fuera a apartarla y doy tal respingo que se me cae el folleto. Se sienta y me vuelve a mirar. 
—A ver qué se cuece esta noche. Es divertido vigilar si se levanta alguna momia. Recuerda que la de Ramsés movió un brazo en su día. 
—No juegues con esas cosas. Me dan respeto.
—¿De verdad te impone, Megan? —Me mira serio.
—Hay cosas que me imponen aún más —le digo sin dejar de mirarlo. Lo veo tragar saliva. Mi corazón comienza a desbocarse cuando observo que se acerca despacio. Una corriente eléctrica me invade al notar el contacto de sus manos sobre las mías. Su boca está a escasos centímetros de mis labios, va a besarme. De repente, empieza a sonar una alarma que nos sobresalta. Alex empieza a mirar con el rostro desencajado las pantallas. 
—Viene de la sala donde está Tutankamón. 
—¿Puede haber saltado por algo? —le digo aturdida. Veo que se levanta.
—No lo creo.
—No veo que haya nadie en ninguna parte del museo. ¡Qué extraño!
Observo que Alex abre la puerta y camina por el pasillo. Me apresuro a seguirlo. Caminamos con sigilo hacia el ascensor.
—Deberías quedarte y vigilar.
—¡Ni hablar! No pienso dejarte solo. —Me mira enternecido por un instante. Me agarra y me hace entrar en el ascensor.
Subimos a la planta de arriba y comenzamos a caminar deprisa hacia la sala del tesoro. El sonido de la alarma perturba mis oídos. Noto la sangre correr acelerada por mi cuerpo y el pulso parece que mueve mis sienes. Empiezo a sentir un sudor frío cuando entramos en la sala. De repente, la luz se va y nos quedamos a oscuras. Tanteo el espacio en busca de Alex e intento reprimir mis apremiantes ganas de chillar. Siento que me estrecha contra su pecho y noto su respiración agitada. El sonido ensordecedor de la alarma deja de sonar. Se escucha un golpe en el pasillo y me aferro a Alex. De pronto, la luz vuelve. Vemos ante nosotros una vitrina rota junto al sarcófago de Tutankamón. ¡Han robado una estatuilla de oro! Alex echa a correr con la pistola en la mano. Lo sigo lo más rápido que puedo. Veo que baja apresuradamente las escaleras y se adentra en la sala principal de entrada. Agarro mi porra y me aflojo la corbata para respirar mejor. Vuelve a oírse un golpe y me recorre un escalofrío. Mi cuerpo se tensa. Nos adentramos con sigilo muy lentamente como león que caza a su presa. Nos escondemos tras el primer sarcófago. Alex se asoma precavido al siguiente y así una y otra vez repetimos el movimiento hasta llegar casi al final de la estancia. De nuevo un ruido procedente del pasillo de columnatas paralelo a la estancia nos pone en alerta. Alex salta al centro de la sala con el arma empuñada. Su mirada es tan desafiante que me estremezco.
—¡Sal de donde estés o disparo! —grita autoritario.
El corazón parece que va a romper mi pecho en mil pedazos. Veo cómo Alex gira sobre sí mismo sin dejar de empuñar el revólver. De repente, un hombre medio enmascarado sale de detrás de la enorme estatua de Ramsés y se abalanza sobre Alex por la espalda. El impacto hace que la pistola salga disparada al suelo. Ahogo un grito desde mi escondite al ver que tiene un cuchillo en la mano y se lo pone en el cuello. Alex forcejea y consigue zafarse del ladrón. Agarra la porra y la agita amenazante. 
—¡No me obligues a usarla! ¡Suelta el cuchillo! —le grita.
El hombre le asesta una patada en el estómago y le hace agacharse. Veo el cuchillo. Trago saliva. El miedo me tiene prisionera y no me deja actuar. Observo cómo Alex se recompone y le atiza con la porra en el costado, pero el hombre no se achanta y lo embiste una vez más. De repente, le asesta un puñetazo a Alex y lo vuelve a agarrar por el cuello. Veo que presiona con fuerza para ahogarlo. ¡No aguanto más! Salto por la barandilla de piedra lo más sigilosamente posible y rodeo la sala hasta colocarme tras la estatua de Ramsés. Sujeto con fuerza la porra y comienzo a acercarme despacio. Los veo forcejear. Presa del pánico y movida por el instinto de proteger a Alex, me armo de valor y, cuando llego junto al ladrón, alzo la porra y golpeo su cabeza con precisión con la intención de noquearlo. Al momento cae desplomado al suelo. Freno su impacto con mi pie y me apresuro a ponerle las esposas. Alex me mira con una mezcla de ahogo y fascinación. Se agacha, hurga en el pantalón del ladrón y saca la estatuilla de oro. Va a llamar a la policía, pero no lo hace. Avanza hacia mí. Trago saliva.  

*Nota: Este relato está publicado y contiene copyright. La copia o distribución sin el consentimiento del autor está prohibida.